Cuando te levantas en la mañana, te preguntas en algún momento si este día será bueno o malo. Lo dudo, pero en fin. Hoy desperté, como siempre atrasado y apurado para salir al colegio, mi vieja siempre preocupada que no me vaya sin tomar desayuno, va a sonar cursi, pero es algo que siempre le reconozco, puede ser muy pesada a ratos, pero es la mejor mamá que uno puede tener, porque la preocupación que me tiene, es única. Me levanté, me duché, lavé los dientes y me puse la ropa lo más rápidamente que pude, salí a tomar la micro, pero ya no estaba, era la última que me servía para llegar a la hora al colegio, no me quedó otra que gastar la plata de la colación e irme en colectivo, era algo que me estaba pasando muy seguido y tenía que cambiar, tratar de despertar más temprano, colocar más alarmas o no sé…tratar de quedarme dormido más temprano. Como la mayor de las veces que tomo colectivo llego aún más temprano de lo común, definitivamente es algo que tengo que cambiar.
Otra vez, al llegar, tengo saludar a las mismas personas de siempre, no es que yo sea pesado ni antisocial, pero de repente no tienes el ánimo suficiente ni para sonreír al saludar, me carga ponerme mascaras y sentirme sínico, pero a veces hay que hacerlo para evitar conflicto o disgustos . . . quien sabe, con algunos compañeros existía una buena amistad y con otros no tanto, pero por cortesía a todos tienes que mostrar tu mejor cara, para comenzar, digo yo, pero al fin y al cabo, eran las mismas personas de siempre, con quienes compartes la mayor parte del día y apenas te queda tiempo para estar con las personas que realmente quieres y te aman de verdad.
Creo que son muy pocas las personas que al momento de levantarse y al mirar por la ventana se dan cuenta cómo estará el día, si será algo común o no. Para mí cada día es especial, aunque estén nublados, pero en sí, todos son buenos, porque demuestran que estoy vivo.
En la clase de lenguaje la profesara comenzó a hablar acerca de la literatura e hizo un resumen de toda la historia de ella, en el momento que daba ejemplo de libros había un compañero que siempre decía el autor de cada libro, parecía enciclopedia hablante, no sé si lo hacía para fastidiar a las personas que no tienen el conocimiento de aquellos nombres, o con el gusto de sobresalir ante todo el curso y lucirse delante de la profesora, y además de todo este individuo se cree mejor de todos, hasta dice que sabe tanto como dios, ¡¡ que estupideces !!.
Como gente egoísta consigo misma y con el resto, también existe esa gente que es compresiva y de las que te entiende, con las que puedes entablar una conversación, a veces actitudes de algunas personas me revientan y disgustan mucho, por ejemplo esa injusticia que existe con esos individuos que son punto fijo de la burla constante, que siempre sea el centro de atención, pero negativamanete, eso es algo que no logro tolerar, pero ¿qué hago contra eso?…nada, ¿por qué?, porque soy poco “guerrero” para mis cosas, como dice Paulo Coelho en su libro de “El Guerrero de la Luz” “Un Guerrero de la Luz siempre defiende a los desvalidos y trata de resolver sus problema, en búsqueda de una consecuencia positiva”, algo así era lo que decía, creo, o parece que lo acabo de inventar, pero como fin ese libro te orienta como ser tú como persona y como ser frente a la sociedad, y creo que la frase que puse es algo que aprendí y cuantas otras me han ayudado a enfrentar el gran camino de todos, que hay que disfrutar momento a momento que es la vida. Hoy recibí una nota muy importante para mi promedio, que el resultado fue fantástico, que personalmente fue como si fuera una nota más, no le di tanta importancia.
En el recreo del almuerzo, salgo corriendo apenas suena el timbre para poder calentar la comida en un microondas, ya que las filas que se hacen son interminables, y el hambre aumenta cada vez más. Después de almorzar junto a algunos compañeros de curso, me fui a sentar en unas de la bancas que tiene el colegio, y lo primero que hice y más rabia me da, fue pensar…comenzar a pensar en cosas que me pasan, por ejemplo cuando yo era pequeño, en el lugar donde vivo actualmente, cerca del departamento mío, vivía una prima que la quiero como hermana, a quien siempre la iba a visitar, hablaba con ella, jugaba, me enseñaba cosas , entre muchas cosas más, hasta que un día toda su familia se cambia de casa y se va a vivir mucho mas lejos, en mi se vino una gran soledad que hasta ahora es difícil sacarla a pesar de que igual la puedo ir a visitar, pero nunca más iba a hacer lo mismo. O también me preguntaba el porqué a mí me tenía que tocar que mis padres fueran sordos, no es que yo los rechace y no los quiera por eso, ellos son un pilar fundamental para mi en esta tierra, pero solo me hacía esa pregunta, el de por qué ellos tienen que ser sordos y no oyentes como son la mayoría, el por qué de que no sentirme tan querido como algunos reflejan hacia a mí, sentirme tan solo, a pesar de estar rodeados de tantas personas, ¿no es algo paradójico lo que digo?, pero es la realidad, mucha gente, muchos conocidos dicen que me quieren mucho, que siempre estarán conmigo cuando los necesite, que si necesitas ayuda no dude en pedirla, dónde está toda esa gente?, será que solo lo dicen con el único fin de hacerte sentirte bien en el minuto que estás con ellos?, es tan injusto, por ese motivo es porque siento tanta soledad, por ese motivo que porque siento que no tengo amigos, suena triste, suena como para que me digan…”pobrecito”, pero es la verdad es algo que simplemente yo siento.
Por fin terminan las clases y es hora de partir al preuniversitario, para prepararse para la vendita PSU que ya parecen disco rayado con el temita, en todas partes, lugar que implique estudios, te tocan el tema. Estaba a punto de llegar a la puerta del preuniversitario, y estaba ella, una mujer que me hizo sentir sensaciones extrañas, que me hizo soñarla en las noches, pero sabiendo que ella me atraía lo único que se dignaba a decirme era que me quería mucho, una más de esas personas que dicen que te quieren mucho, yo pensé que después de un largo tiempo yo me iba a olvidar de ella, pero eso no fue así y más reafirmé mi pregunta cuando la vi con otro, creí que el mundo se me caía en cima, me deprimí, lo único que atiné a hacer, fue darme vuelta para tomar la micro e irme a mi casa.
Mi mamá no dijo nada, solo me preguntó por qué estaba de malas, que por qué siempre cuando llego tengo cara de mono, no le quise responder.
Me acosté, vi un poco de televisión, como de costumbre, la apagué después de un buen rato, cerré los ojos y traté de dormir, no pude, hice la común conversación con la almohada, que realmente es con uno mismo, en mi mente pasaban tantas imágenes, tantos momentos, mis padres, mi familia, compañeros, esa hermosa mujer que me encantó, el por qué no puedo ser un adolescente normal que no se preocupa de las tonteras que yo me preocupo, de que siempre está feliz por la vida y por lo menos de lo que se ve, nunca está triste, siempre en fiestas, con un montón de amigos, siempre invitado a todas partes. ¿Por qué no podré ser así?, ¿Por qué no puedo obtener esa felicidad?, pero como decía Aristóteles, el hombre está en una constante búsqueda de la Felicidad y si la encuentra va a ser apenas un instante, un momento fugaz, que se va a acabar, por eso hay que disfrutar cada día lo más que se pueda, vivir cada momento y creo que ahora estoy en busca de mi felicidad y espero encontrarla pronto y que sea definitiva y no temporal.
